El 8 de
agosto es Día Internacional del Orgasmo Femenino y se celebra en varios países del mundo. Fue
instituido hace siete años, en una
pequeña ciudad de Brasil llamada Espertina, cuando un concejal de nombre Arimateio
Dantas decidió promulgar una ley.
La norma
obligaba a los maridos, amantes, novios o departientes sexuales a satisfacer a
sus mujeres y compensarlas por las “deudas sexuales” contraídas durante el año.
La
celebración se masificó por el mundo y pretende la satisfacción estimulando las
zonas erógenas —especialmente el clítoris— de las damas para que ellas lleguen
al clímax, y no finjan más. Rápidamente este día fue adoptado por países como
Dinamarca, Noruega, España, México, Perú y Argentina, con acatamiento dispar.
Los datos
son elocuentes. Algunos estudios apuntan a que más de 90 por ciento ha fingido
un orgasmo al menos una vez en la vida. En el Informe Hite sobre sexualidad
femenina, de 1970, el 53 por ciento de las encuestadas contestó afirmativamente
a la pregunta de si fingía alguna vez sus orgasmos. ¿La causa? Según Shere Hite
:"La enorme presión para que las mujeres tengan un orgasmo durante la
penetración vaginal”. Fingiendo el orgasmo las mujeres terminan con una
situación molesta que no las lleva a ninguna parte y salvan la autoestima
masculina mostrándoles que les han dado un gran placer.
Una encuesta
realizada por el Instituto Mexicano de Sexología (Imesex) arrojó que la mitad
de las mexicanas confesó jamás o muy rara vez haber experimentado un orgasmo, y
según un estudio realizado por el Instituto Kinsey de Estados Unidos, solo un
tercio de las mujeres en todo el mundo llegan al orgasmo a partir de prácticas
sexuales.
(Fuente: periodismoenlinea.org)
No hay comentarios:
Publicar un comentario